sábado, 4 de junio de 2011

LOS INDIGNADOS



¿A quién se le hace tropezar, y yo no me indigno?
(San Pablo 2Co, 11.29)


Esto que sigue, no lo escribió San Pablo, pero tampoco lo escribí yo. Lo escribió Antonio Burgos, justamente en el día de la fecha que seguidamente se señala:


Antonio Burgos
Día 19/05/2011 - 22.16h

Dicen que están indignados. ¿Ahora os vais a indignar, hijos míos de mi alma, a tres días de las elecciones y montando la mayor exculpación de un Gobierno inepto que vieron los siglos? ¿Precisamente ahora os vais a indignar? Indignados, no: lo vuestro es indignante.

Es indignante que os indignéis precisamente ahora, y no cuando empezó la crisis y estos tíos la negaban.

Es indignante ese tufillo a «Nunca mais», a «No a la guerra», a sindicato de la ceja y a asalto a las sedes del PP tras el 11-M que da vuestra manifestación «espontánea».

Es indignante que a ZP ni lo mentéis y echéis toda la culpa al Sistema.

Es indignante que esas pancartas tan «espontáneas» tengan todas el mismo diseño, tipografía, tamaño y colores.

Es indignante que le hayáis dado a la Puerta del Sol ese ambiente de Nochevieja, que sólo falta Belén Esteban en un balcón retransmitiéndolo para Tele 5.

Es indignante que aquello parezca una botellona.

Es indignante comprobar que, por casualidad, claro, en esa Puerta del Sol tiene su despacho Esperanza Aguirre.


 Indignados de dia. ¿Quién ha sido?


Es indignante que no hayáis acampado en La Moncloa, que es donde está el secretario general del partido creador de este Sistema, al que en Andalucía llamamos Régimen.

Es indignante que ni mentéis a los 5 millones de parados, ni a los sindicatos del pesebre.

Es indignante que acuséis a «los dos grandes partidos» y que no aludáis ni por equivocación al tercero, al que impide siempre que uno de esos dos grandes partidos gobierne si no saca mayoría absoluta, y propicia sumiso que lo haga el otro mediante los pactos entre perdedores que haga falta, y me refiero a Izquierda Unida, por si no queda claro.

Es indignante que no digáis ni palabra contra el Gobierno que creó esos 5 millones de parados, que congeló la pensiones, que rebajó el sueldo a los funcionarios, que ha provocado el 40 por ciento de desempleo juvenil.



Indignados al atardecer. ¿Quién habrá sido?


Es indignante que os pronunciéis contra el Ejército, pero no contra la absurda presencia de nuestras tropas en lejanos países donde no se nos ha perdido absolutamente nada ni se defiende a la Patria.

Es indignante que reclaméis «democracia real», cuando aquí la tenemos gracias a Dios desde 1975; tenemos democracia real porque la trajo un Rey, el de todos los españoles, que acabó con la dictadura; bendita democracia que ahora permite que liéis la que estáis liando.

Es indignante que el Gobierno incumpla las órdenes de la Junta Electoral para acabar con la presencia callejera de los indignados en tan señalados días de votaciones.

Y es indignante que aquí en Sevilla la protesta se haya hecho bajo Las Setas, cuando ninguno de los que están allí protestó contra este Ayuntamiento desforestador y arboricida que despilfarró 20.000 millones de pesetas en esa mamarrachada, ni protestaron contra los EREs, ni protestaron contra el nepotismo del Régimen de Chaves, ni protestaron contra las facturas falsas...


Indignados a la hora del crepúsculo... ¡Ha sido el Sistema!


¿Indignados? ¡Tequiyá con la indignación de diseño asistido por ordenador, y yo sé quién es el ordenador, el que la ha ordenado! Yo sé quién lo ha orquestado todo desde las redes no sociales, sino socialistas, para repetir lo mismito que hicieron tras el 11-M y que colocó en La Moncloa al peligrosísimo inútil que nos ha traído esta ruina provocada por una izquierda que siempre se resiste a obedecer a las urnas y a abandonar el poder.



 Indignados de noche... ¡El Sistema y... Esperanza Aguirre!

Para finalizar, esto si que lo digo yo:  ¿Por qué no la convocatoria de elecciones generales, antes de que se hunda España y se mueran de hambre todos los que ahora se indignan tanto? “¿Quién ha sido” el causante de la indignación?  Luis Madrigal.-







CINCO SONETOS A AQUEL VIENTO TAN SUAVE (V)



V


MAS... TODO CALLA


No puede ya el dolor calar más hondo
cuando, de aquel susurro, todo calla,
se oculta en la distancia y nunca se halla
el modo y la manera de hallar fondo.

Por más que del recuerdo veo y asondo,
nada percibo ya… El ayer soslaya
la onda en la que el alma se desmaya,
y ni caminos veo… Huecos rondo.

Ya todo es duda, de lo que fue cierto,
aun tan débil que nunca vivió fuerte.
Murió al nacer, de frío, al descubierto

y se fue en flor, helado de tal suerte,
que, más que un fruto vivo, estaba muerto.
Y no hay nada más frío que la muerte.



Luis Madrigal