domingo, 16 de octubre de 2011

ENTRE SUEÑOS Y NUBES




BUSQUÉ QUÉ PODRÍA DARTE


 Pensaba sin saber en qué pensaba...
que, ardientemente, en ti ya no podía.
Mas  -dulce-  tu recuerdo a mí venía
y lo mismo en ti estoy que antes estaba.

Tu sonrisa, aun tan triste, recordaba
escondida en el alma... Tal quería
salir de ti y buscar... Y aún sonreía
sin saber donde hallar lo que buscaba.

Ven hacia mí  -pensé-  yo te decía,
aunque nada he de darte. No soy nada.
Te daré el corazón... ¡Más... no tenía!

Mas pronto descubrí, tras la alborada,
que un lucero, entre luces, florecía...
Y lo quise bajar hasta tu almohada.




Luis Madrigal