lunes, 28 de julio de 2014

EL DEVENIR DEL TIEMPO



AYER, ES UN FUTURO

Otra vez se desliza el pensamiento
hacia oscuros rincones, donde habita
la nada, que es la sombra, y que concita
entre nausea y temblor el sentimiento.

Un segundo  -no más-  el polvoriento
reguero de zozobra la fe escita…
La luz del cielo es el punto de cita
y la negra visión huye al momento.

Quiere creer que “ayer” es un futuro;
que han de volver los días que pasaron,
con la luz y el color del ser más puro.

Espera tener ya lo que esperaron
quienes temieron ver un seno oscuro,
para por siempre amar a quien amaron.


Luis Madrigal




Fotografía de Sam Howzit