sábado, 15 de diciembre de 2012

AUN SIN NIEVE



YA SE VEN BROTES DE NAVIDAD


Hoy ha brillado el sol desde el comienzo del día, empujando las densas nubes que días pasados derramaron el fruto de su vientre. Lo llevaron hacia el Norte, donde las olas del mar levantan barreras y violentos muros, tan sólo para arrasar las débiles hojas de los árboles, ya húmedas y vencidas, en un esfuerzo desproporcionado y baldío. Los navegantes empero, habrán de amarrar sus navíos para que el bravío Cántabro, enfurecido, no los engulla, sepultándolos en sus abisales entrañas. Mas, en la llanura, el sol acaricia la mirada de los caminantes y, en la Ciudad, comienzan a surgir los signos de la Navidad, siempre escondida en la Historia, pero siempre viva y eterna. Tan sólo falta la nieve. Pero, muy pronto, pese a la penuria de los tiempos, Madrid volverá a ser un ascua de luz.

Luis Madrigal