viernes, 15 de mayo de 2020

EL PAGO


A UN TRAIDOR

El Pagador es la República Bolivariana de Venezuela

(Trátese de ampliar esta imagen. Seguramente no resultará posible, pero se encuentra en Internet. No renuncien a verla. Se trata de una transferencia efectuada por el Ministerio de Economía y Finanzas de la República Bolivariana de Venezuela, por la cifra de $272.325,00), esto es, de DOSCIENTOS SETENTA Y DOS MIL, TRESCIENTOS VEINTICINCO DÓLARES AMERICANOS, a través del banco EUROPACIFIC BANK, A FAVOR Y NOMBRE DEL BENEFICIARIO Don PABLO IGLESIAS TURRIÓN



El pago  -o cumplimiento-  es el modo natural de extinción de las obligaciones. Así lo establece, in génere, al artículo 1.157 del vigene Código civil español, aceptando -de las tres acepciones de la palabra pago- la que la doctrina más clásica llama restringidísima, esto es el cumplimiento  mediante la entrega de una suma de dinero. ¡Y vaya suma, en el presente caso! Porque también la mencionda palabra tiene otras dos acepciones, las cuales, ambas, resultan procedentes a la ocasión. La generalísima, de cumplimiento de toda obligación, y su consiguiente extinción, y la estricta, de cumplimiento efectico de la prestación convenida, especialmenete en las obligaciones de hacer, o  en las de no hacer, en las que el cumplimiento de la obligación necesariamente ha de ser una conducta o una abstención, e incluso, en menor medida, en las de dar, aunque en este último caso se tratase de entregar una cosa por parte del deudor al acreedor. Naturalmente de entregarla -"traditio"- en propiedad, aunque pudiera ser también en usufructo o en uso.

En el caso de referencia, no podemos saber qué se convino exactamente entre la República Bolivariana de Venezuela y el Sr. Iglesias Turrión, por falta de fuentes, lo que si resulta probado es que, además de ser beneficiario de la transferencia, dicho señor lo es "en concepto de Asesorías para el desarrollo social del país.", según consta expresa y literalmente en la misma transferencia bancaria. Y no sólo esto, sino tambien que se trata de un pago por "Convenio suscrito". Esto es, sabemos que se trata de un contrato  -puesto que esto y no ninguna otra cosa de naturaleza no contractual, puede calificarse de "convenio"- y podemos saber también la causa (elemento esencial de todo contrato, en unión del consentimiento de los contratantes y de un objeto cierto que pueda ser materia del mismo, a tenor del elemental, y al propio tiempo esencial precepto contenido en el art. 1.261 del Código civil. Desde luego del Código civil español, nacionalidad que concurre en el Sr. Iglesias Turrión, con lo cual, al regirse la otra parte, suponemos, la República Bolivariana de Venezuela, en el orden privado, por su propio Código civil, pudieran plantearse algunas cuestiones de Derecho Internacional Privado, y entrar en juego las normas de conflicto de este carácter, hasta dirimirse cualquier posible controversia entre las partes ante el Tribunal Internacional del Haya.

Mas, separándonos de toda cuestión de Derecho, es de dominio y conocimiento público, de un modo patente y reiterado, que la República Bolivariana de Venezuela, no sólo es un régimen totalitario sino también marxista-leninista. Como también lo es -es una realidad del mismo tenor que la anterior- que el Sr. Iglesias Turrión realiza, por convenio, trabajos de asesorías (el plural induce a pensar en un contrato de tracto sucesivo), para tal República, con total independencia de lo que de ésta cobre o de lo qué le pague. Y, por último, y este es un factor especialmente significativo y de suma importancia para los españoles. Para muchos millones de ellos, conscientes. Para algunos otros, quiero pensar que simplemente víctimas de una modorra colectiva, sembrada y cultivada con esmero por los planes de estudio en España de las últimas cuatro décadas, como mínimo, como ya anunciaba, al final de los años sesenta o comienzos de los setenta, Don Antonio Tovar, el que fuera Rector de la Universidad de Salamanca:

"La educación ha entrado en crisis en todo el mundo por una serie de complejos problemas entre los que la masificación no es el menor. Los sistemas se han quedado anticuados y la enseñanza además de un derecho se ha convertido en una necesidad en nuestros días. El que sólo tiene sus brazos para ofrecer a la sociedad no puede subsistir. Quizá valga para calibrar las dimensiones de esta crisis el hecho de que incluso en un país como Francia, con tan larga tradición escolar, ha destrozado sus cuadros por completo. En España ha sido peor porque hemos asistido a la destrucción de dichos cuadros desde antes de la crisis y desde el interior del propio Estado. O sea, que cuando la crisis ha llegado el Estado se ha encontrado sin medio alguno para combatirla. La culpabilidad de la Iglesia en este terreno es grande. Hemos visto durante años cómo desde el aparato gubernamental se destruía conscientemente el Bachillerato y la Escuela primero y la Universidad después en beneficio exclusivo de la Iglesia, que ha mostrado unas ambiciones desmesuradas en materia de educación. La Enseñanza Media, concretamente, fue entregada, por completo, en sus manos. Total, que cuando el Estado quiere hacer una reforma educacional resulta que no tiene ni siquiera lo mínimo necesario: una red de institutos y un profesorado suficiente. Eso no se improvisa, claro. En la Universidad creo que hemos rebasado todos los límites imaginables del problema. A la crisis educacional misma se ha sumado la rebelión de la juventud. Yo puedo decir que me considero desbordado por la nueva situación, y desde luego nunca tuve que enfrentarme, siendo rector de Salamanca, a problemas como los que ahora existen. En Alemania también suceden hoy cosas parecidas, pero creo que existe una diferencia esencial: los cuadros educacionales alemanes no han sido destruidos. Y el problema aquí se mezcla además con la incertidumbre política, la industrialización fulminante que ha sufrido el país, la pérdida total de creencias y valores muy arraigados durante siglos en la sociedad española."

 Y si el sistema educativo entró  en crisis, mucho más grave fue, en notable y notoria mayoria, la harapienta mediocridad de sus enseñantes y educadores, en union de unas generaciones de "padres" de los educandos que, por unas causas u otras no podían acometer la esencial labor de educar de verdad a sus hijos, abandonandolos al consumismo de las cosas que ellos no habían podido consumir ni poseer. Y así hemos llegado a donde hemos llegado.

Yo no he leído excesivo número de libros sobre el comunismo. Me gusta más llamarlo marxismo-leninismo, porque considero que es más exacto. Hace ya muchos años, hasta leí uno, escrito por un Obispo de la Iglesia Católica, un francés, Monseñor Ancel, a la sazón Obispo Auxiliar de Lyon. El título del libro era el de "Dogma y moral comunistas". Mera ilusión, o mera intencionalidad apostólica, por parte del autor. El comunismo  -el marxismo-leninismo-  puede que tenga algún dogma, tan falso como la misma intrínseca falsedad, pero lo que parece cierto e incontrovertible es que carece por completo no sólo de toda moral, sino de la más mínima sensibilidad, providad y caridad humanas. Desde luego me niego a admitir que el comunismo sea tan sólo un sistema político y un modo de organización socio-económica, caracterizado por la propiedad en común de los medios de producción, así como por la inexistencia de clases sociales y de un Estado.​​​ Como bien acertó a definir el gran Papa Juan Pablo II, hoy en los altares, es "el imperio del mal"; la más cruel interpretación de lo socialmente injusto, mediante el tiro en la nuca, las fosas comunes y, desde luego, una larga y sangrienta historia de muerte. Se calculan más o menos en torno a los 120 millones, los seres humanos asesinados en el mundo, entre todos ellos, también en parte entre ellos, por la República Bolivariana a la que asesora el Sr. Iglesias Turrión. Prefiero partir de los hechos probados, máxime tras la desclasificación de los archivos del Kremlin y de lo que han desvelado los documentos que en ellos se ocultaba. Algo más dijo en su día el martirizado Cardenal József Mindszenty, Primado de Hungría, más de cincuena años en las cárceles comunistas. Y no he leído demasiados libros. Por ello, me remito en todo al magnífico texto de 759 páginas, plagado de pruebas, en notas al pie, de un ex-comunista en su juventud, Federico Jiménez Losantos: "MEMORIA DEL COMUNISMO, de Lenin a Podemos". Ruego su lectura, detallada y a ser posible tomando notas y reflexionando sobre ellas después, a los electores españoles de buena voluntad, y como tal de buenas personas, que han permitido, sin duda ireflexivamente, la formación del actual Gobierno socialista-comunista-separatista de España. Y a Usted, Sr. Rajoy, ¿qué le debo decir?. Yo confiaba en Usted, pero Usted, habiéndolo hecho muy bien en algunas cosas, nos ha echado a los leones.

Porque el silogismo, en cualquiera de las formas en que pudiera estructurarse  -prescindo de las clásicas,  BÁRBARA, CELARENT, DARII, FERIO.​. etc.-  es tozudo en su conclusión. Es más, más que de un silogismo, se trata de una evidente conclusión, axiomática por sí y en sí misma: El Sr. Iglesías Turrión, es asesor de la Republica Bolivariana de Venezuela, cuyo regimen político totalitario es el comunismo, por lo que cabe pensar licitamente acerca de qué y en qué pueda asesorar a aquel Estado. Y sobre todo de cómo, sobre cuyos científicos procedimientos tengo entendio escribió su tesis doctoral, para ser PNN en la Universidad, incluídos los cókteles Molotov. Y teniendo en cuenta, que el mismo señor es  -por perjura ambición o por lo que sea del "otro señor"- Vice-Presidente del Gobierno de España, existe el riesgo de que, en cualquier momento, el Reino de España, se convierta también en República Bolivariana. Espero que el Sr. Teniente General de la Benemérita Guardia Civil, el que comparecía hace días en los mítines que organiza el Gobierno, no me detenga bajo acusación ninguna, ni en relación con el virus chino ni con ninguna otra cuestión. Tan sólo estoy ejercitando mi derecho a la libre expresión, derecho individual constitucionalmente garantizado (art. 20 a) CE78). Es más, en una interpretación que no me corresponde, ni a ella estoy facultado, pero tampoco tengo prohibida, en virtud del mismo derecho, me permito preguntar al Sr. Teniente General acerca de su opinión sobre el contenido del artículo 8, 1., y asimismo del art. 62, h) de la misma Carta. Porque se ha discutido, doctrinalmente, si tales preceptos constitucionales podrían, en su caso, ser de aplicación directa. ¿Por qué no dió Usted, Excmo Sr., instrucciones a sus subordinados de detener al Sr. Iglesias Turrión, que sí contravino las normas jurídicas establecidas. Es más, ¿por qué no le detienen ya de una vez? ¿O acaso están esperando a que se organice y abra en Madrid, la primera de las 120 Checas, más los 50 "otros lugares de detención", en los que se torturaba y mataba a quienes no eran comunistas? En la Capital de España, a parte de Barcelona y la Comunidad Valenciana, Provincias de Castellón Valencia y Alicante, llegaron a funcionar, estremecedoramente, hasta un total de 496 antros de muerte en aquellos espantosos días, que el Sr. Jiménez Losantos clasifica, con pelos y señales, en las págs. 689 a 702, de su ya citado luminso libro.

Lo que, en todo caso resulta cierto y probado es que:   
 


El Pagado, es este PNN, mediocre y cuasi-analfabeto, marxista-leninista


La información de OKDIARIO sobre el pago de 272.325 dólares del Gobierno de Venezuela a Pablo Manuel Iglesias Turrión en una cuenta a su nombre en el banco Euro Pacific del paraíso fiscal de Islas Granadinas fue veraz, contrastada en fuentes policiales, alejada de una mera invención, de interés general y ajustada a la doctrina del Tribunal Supremo.


Así de contundente se manifiesta la titular del Juzgado de Primera Instancia número 84 de Madrid en la sentencia que desestima la demanda del secretario general de Podemos contra este diario al no entender vulnerado su derecho al honor. La magistrado sí condena a Iglesias al pago de las costas del procedimiento judicial.


Para la Juez Doña Gladys López Manzanares prevalece en todo momento el derecho a la información sobre el derecho al honor: La difusión de una investigación policial sobre la existencia de una cuenta a nombre del demandante en un banko offshore, con sede en un paraíso fiscal, y su relación con la orden de pago y autorización del mismo realizados por autoridades venezolanas no suponen sin más un ataque al honor del demandante.

También la representate del Ministerio Fiscal, Doña Carmen Palomar Linares había argumentado en su calificación del hecho:  "Aquí no hay insinuaciones, invenciones o rumores… Lo que hay es una verosimilitud de los documentos… diligencia informativa y una noticia veraz".

No tengo, de momento, más pensamientos, ideas  ni opiniones que expresar y en este caso difundir por escrito. Esto es, lo que la Constitución Española, expresa y literalmente permite.

Luis Madrigal