viernes, 10 de junio de 2011

AL ALBA




SI LA NOCHE APAGA LOS LATIDOS


Cuando la luz del alba no sonría
y oscuros nubarrones se aposenten
tan dentro de tu alma, y sólo alienten,
en medio de un barranco la agonía…

¡Levántate de un salto y a porfía
grítale al Cielo…! Los sentidos, sienten…
Espera… que tus ojos ya presienten,
tras negra noche, claridad de día.

Verás brillar de luz, en la colina
que se alza tras los álamos del río,
las verdes hojas, que el sol ilumina.

Y un nuevo resplandor de tu albedrío,
para alegrar el paso que camina,
tornará por calor gélido frío.



Luis Madrigal