domingo, 30 de marzo de 2008

REZO POR TI, ARGENTINA

Hay que dejar la filosofía, para ocuparse de la vida. Y no por prescripción del tan repetido, y tal falso, principio primum vivere deinde philosophare. Es falso porque, no se filosofa para vivir, sino porque se vive, y para ello es preciso saber qué es lo que se está viviendo en cada momento. Y, en este sentido, quizá no son demasiados los españoles que se hallan detalladamente informados de lo que, en estos momentos, está sucediendo en la Argentina, desde hace ya más de quince días. En síntesis, se vive y sufre una enconada obstinación, por parte del Gobierno de doña Cristina Fernández de Kirchner, y una postura de absoluta inflexibilidad, del lado de los trabajadores del campo -hay quien opina que son los propios capitalistas agrarios quienes los mueven- que ha dado lugar ya, no sólo a enfrentamientos y saqueos, sino a la muerte de personas inocentes y, como siempre, de las más humildes y desfavorecidas. En la localidad de Villa María, muy cercana a la ciudad de Córdoba -“la Docta”- el bloqueo de carreteras establecido por los piqueteros ha impedido el paso de una ambulancia de socorro, dando lugar al fallecimiento de la persona que estaba siendo atendida, y que podría haber salvado su vida sin dificultad alguna, de haber podido llegar la ambulancia al hospital al que se dirigía. Por otra parte, el desabastecimiento de productos alimenticios básicos, como el harina, constituye un duro golpe a los más pobres. Según me informan desde allí, la clase media puede adquirir y acumular tales productos. Quienes no pueden, son otros, los de siempre. Es una cuestión que viene de lejos. Desde antes de la etapa del Presidente Duhalde, al que sucedió el marido de la actual Presidenta, el señor Néstor Kirchner. Ya, en su edición de 28 de Diciembre de 2003, el periódico digital “Perfil.com”, escribía lo siguiente: Cuando el ´periodismo de mercado´ argentino, eternamente "oficialista" a cambio de un salario, habla del conflicto Kirchner-piqueteros, omite puntillosamente referirse a la raíz causal del problema. Durante décadas de explotación capitalista de la Argentina, millones de personas fueron expulsadas del mercado laboral, perdieron su vivienda, su salario, sus fuentes esenciales de supervivencia. Esas personas, víctimas de sucesivos genocidios con gobiernos militares o civiles, tienen un nombre técnico: ´desocupados´, o ´pobres´. La función principal de los gobiernos subordinados como el de Kirchner, es la de "contener, controlar o reprimir" esos conflictos que atentan contra el "normal desenvolvimiento" de los negocios capitalistas en la ArgentinaY concluía diciendo: “Si el Presidente tomase la decisión de otorgar un aumento masivo de salarios, invertir en planes para reactivar y generar empleo masivo, y poner al Estado como gerenciador de la riqueza nacional en detrimento de los grupos concentrados del poder económico, Néstor Kirchner hubiese durado 48 horas". Eso se escribió entonces. Y, muy posiblemente, la Sra. Fernández no puede hacer otra cosa que ratificar la política asistencialista iniciada por Duhalde y continuada por su marido.

Pero, a nosotros los españoles -a este español- lo único que nos importa, sin ingerencias ni complejos de ningún género, es que nuestros hermanos argentinos sufran, viéndose abocados a tan tensa y crítica situación. España no debe olvidar que la Argentina, hace ya muchos años, fue el país, no sólo que le auxilió y le tendió la mano, sino que le acompañó en su soledad y destierro de las instituciones internacionales. Quiénes gobernasen entonces ambas naciones, tampoco importa, por que cómo dijo aquel gran amigo de España, llamado Juan Domingo Perón, A mí no me importa tanto el General Franco como el pueblo español. No se equivoquen ustedes. Si Franco dirige los destinos de España, ello es cosa que concierne al pueblo español y no a nosotros”. Y es también digno de recordar con la mayor gratitud, aquel texto del diario “Crítica”, cuando escribió: “Para Argentina lo que cuenta son los españoles, el pueblo de España, lo permanente de su ser, y no la forma en que se gobiernen o desgobiernen entre ellos nuestros hermanos de allende el Atlántico, porque esto es lo eventual, lo transitorio”. Del mismo modo, y recíprocamente, años antes, Washington informó que no reconocía al gobierno del Presidente Farrell y su embajador fue retirado, al tiempo que instó a otros países a que hicieran lo mismo. Esta política fue adoptada por varios estados, cuyos embajadores retornaron para "consultas". Sólo diez países continuaron manteniendo relaciones diplomáticas plenas con Argentina, y España fue uno de ellos. Y por último, no puedo menos de recordar con el más hondo sentimiento, aunque entonces era yo un niño de corta edad, la visita a España de la esposa del Presidente argentino, doña Eva Duarte de Perón, en Junio de 1947; la placa de la calle de mi Ciudad natal, siempre fija en mi memoria, que dice “Avenida de la República Argentina, como en otras muchas ciudades de España. Por cierto, casi todos los días paseo por un pequeño Parque, en Madrid, junto a la antigua Plaza de Roma… Este ámbito, vegetal y arbóreo, se llama “Parque Eva Duarte”. Por algo será. Un estrecho abrazo a todos los hermanos argentinos. Tened esperanza. ¡Saldremos de estas, una vez más!. Luis Madrigal.-