BRILLA EN LA
LUZ LA VERDAD
Lo que pasó, no es. Es
verdad muerta.
Si, además, no vivió, ni
verdad era,
no queda nada muerto que
viviera,
ni queda otra verdad que
fuese cierta.
Amanecer sin luz, sombra
cubierta
de opaco resplandor en que
se viera
apagarse la vida, a la vera
de una senda en el Mar,
siempre despierta.
Tan sólo una canción inunda
el aire,
que a expandir más allá se
niega el viento,
sin despecho, reproches ni
desaire.
Sobre mudo silencio, hoy el
acento
nuevo suspiro exhala, y al
socaire
brilla en la luz verdad y
sentimiento.
Luis
Madrigal
Arriba, fotografía de Smirno Valelish