sábado, 23 de octubre de 2010

NO TE OLVIDARÉ




SENTIRÉ TU LATIR CADA MAÑANA


Si algún día te olvido, es que estoy muerto...
Sólo espero ese día una palabra
al Alba de la Historia, en que se labra
el ser y el sentimiento, puro y cierto.

Y, aun muerto, para ti estaré despierto,
oiré tu acento sin señal macabra,
diré al sepulturero que me abra
y me verás lleno de luz cubierto.

Sentiré tu latir cada mañana
y hasta entonces seré sin haber sido,
puesta siempre mi vista en tu ventana...

Sin perder esa flor ni estar perdido,
mariposa dorada y araucana,
nunca te olvidaré... Nunca te olvido.




Luis Madrigal