jueves, 19 de febrero de 2015

DE LOS LEJANOS MARES UN SUSPIRO



PATIO DE LUZ Y CAÑAS

Vivo de vuestra luz, plantas amigas,
parapeto de cañas y frontera
de macetas en banco de madera,
de sol repletas y jamás de ortigas.

Como al campo en Abril un haz de espigas
tiñe de verde aura, en tierna espera,
de la mano que empuña la mancera
-el sol en lo alto siempre-  sois aurigas.

Nunca ya más podré dejar de veros,
desde tan lejos, si tan cerca os miro,
tras día y noche sin poder teneros.

De cuantos cielos vi, suave zafiro;
del tiempo en que os miré, siglos enteros
y de lejanos mares un suspiro.


Luis Madrigal