ERAN TAN
LIMPIOS CRISTALES…
I
Vuelan
granítica losa,
que
el viento pule y arrasa…
Fuera
del tiempo que pasa,
ven
ya la luz más hermosa.
II
Sus
almas eran cristales
tan
limpios que al Sol dejaron
pasar,
y en él se abrasaron
mil
auroras boreales.
III
Hoy,
ya no ven lo que vieron
ni
oír pueden lo que antes…
Que,
del ayer tan distantes,
ni
ojo ni oído fueron.
Luis Madrigal