lunes, 8 de diciembre de 2008

BENDITA SEA SU SANTÍSIMA E INMACULADA CONCEPCIÓN



¡Inmensa como el Mar eres, María!,
que de tu manto azul, su manto toma;
la nieve, tu color; la flor, tu aroma.
De tu fulgor, el sol, la luz del día.

Si de mis horas eres alegría,
cuando a mi corazón la angustia asoma,
no me dejes si mi alma se desploma...
¡Guárdame entre tu pecho, Madre mía!

Si eres Madre, en regazo tan doliente,
del que siendo divino se hizo Hermano
y en tus brazos estuvo un día yacente,

pon tu mano también sobre mi mano;
tus labios maternales en mi frente,
que he de ver al Amor y... soy humano.


Alphonso CARBAJAL



Arriba, la Inmaculada (Murillo). Seguidamente, "Ave María" (Schubert). Luciano Pavarotti.