Como suele decirse en los escritos administrativos, “es de referencia” mi entrada del pasado día 29 de Junio, en este mismo Blog -“Perdieron hasta en su casa”-relativa a los alentadores resultados, a mi juicio, obtenidos en las recientes elecciones legislativas de la República Argentina. Tengo que decirlo una vez más, aunque en realidad tan sólo he tenido que hacerlo un par de veces, en estos malditos casos: No me parece nada bien que, sabiendo quién soy yo, sea quien fuere el que comenta lo que escribo, no pueda saber yo quién es él, o ella. Ese “embozarse” hasta las cejas bajo un nombre español, o hispánico, y hasta itálico, tan común, por especial resulte, como “franco” (con minúsculas, claro, incluida muy especialmente la letra inicial) y sin más señales de identidad, para tratar así de escupir a los demás, no constituye desde luego ninguna prueba de valentía, sino más bien es propio de miserables y de cobardes. De todos modos, contestaré aquí al estúpido comentario que un “señor” con el referido nombre, por toda identidad, formuló al brevísimo texto de mi indicada entrada. Podrán encontrarlo al pie de la misma, como es bien sabido, e invito especialmente a ello a las personas de nacionalidad argentina, rogando al comentarista, y a todos ustedes, me disculpen si me extiendo en exceso.
Desde luego admito la superficialidad de mi texto, aunque no tanto como “en extremo”. ¿Acaso hay que acometer una “causa general”, con argumentos y análisis político-jurídicos, para decir que estos dos señores, los Kirchner, ella y él, además de no deseables, resultan especialmente nefastos para la Argentina? Debería saber el señor “franco” que mi superficial opinión responde al sentir propio de bastantes millones de argentinos, la inmensa mayoría, como prueban los hechos. O, ¿acaso es Usted el que prescinde de su acendrado espíritu democrático, extra-territorial? Yo, no-le respondo-aunque no crea que esto de la democracia es tan valioso como Usted y otros muchos creen. Tan sólo consiste en depositar un papel en una urna y contar después los papeles. Y en este sentido, no es nada terrible, sino muy saludable, que Mauricio Macri, que es Ingeniero civil (no como, aquí en España, “el compañero” Roldán) por la Universidad Católica de Argentina y Francisco de Narváez Steuer (el nieto materno del viejo Karel Steuer, que desde Praga fue capaz de extender hasta Rumanía y Yugoslavia, con escala en Colombia, un imperio de riqueza (que es la que se puede repartir, y no de pobreza, que tan sólo se puede compartir cristianamente), no es nada terrible-digo- sino una excelente noticia, que estos señores ganen votos y poder, para sacar a la Argentina (quinto país potencialmente más rico del mundo) del estado de miseria y postraciónen el que se encuentra con la notable colaboración de los defendidos del señor “franco”. Dije “mediocres”, pero esto es un elogio; no son mediocres, que tan sólo implica calidad media, son absolutamente malos. Malos, en todos los sentidos, especialmente, “item mas”, si consideramos el absoluto silencio guardado sobre la Gripe A, antes y durante las pasadas Elecciones, para confesar después de ellas, cientos de miles de infectados y más de 50 fallecimientos, sembrando el miedo y la psicosis colectiva en la querida nación hermana.
En cuanto a mí concierne, humilde e insignificante pobre ser humano (como el mismo señor “franco”, y como casi todos los demás), puedo asegurar que he cumplido con su consejo de situarme ante el espejo, a fin de comprobar mi propia mediocridad, no sólo “unos instantes”, sino más de media hora. Lo he hecho, deliberadamente, a fin de no dejarme llevar por ese instinto mediante el cual todos nos vemos maravillosos a nosotros mismos, y puedo asegurar a dicho señor, o señora -¡quién sabe!- que, en esta perspectiva, honestamente analizadas todas las circunstancias de mi vida, desde mi más tierna infancia; mi expediente académico universitario; mis ya casi cincuenta años de ejercicio profesional como Abogado del Ilustre Colegio de Madrid, y los casi cien procesos judiciales sobre mis hombros, y alguna pequeña cosa más, si me comparo con los Kirchner, ella y él, y no digamos si lo hago con este otro ser del “interior” español, al que el citado comentarista implícitamente parece referirse, y que como bien dice “está” en el poder ejecutivo del Estado, podría ser yo Emperador del Japón o Presidente del Planeta, cuando se cree ese cargo. Y, si me comparo con el señor “franco" que muy probablemente procede de algún “Curso de Verano”, seguramente ni podría verle, pero, créanme, soy tan humilde que hasta accedo a contestarle.
Oiga Usted, señor "franco", yo no formo parte de ninguna "caterva", y menos aún en el sentido peyorativo con el que Usted utiliza esta expresión. Yo, procedo de la Universidad y de la Ciencia del Derecho, aunque, últimamente, algunos la hayan convertido en una alpargata. Los que son una verdadera caterva, en el grado superlativo del mismo peyorativo sentido, son ustedes, quienes no pueden coincidir, ni conmigo ni con nadie normalmente decente, en el amor a ninguna patria, a ninguna Biblia, ni al arte de la tauromaquia, que es un arte plástico y noble, propio de valientes... ¿El General Franco? ¡Se murió, hombre...! Pregúntele Usted al Juez Garzón. Ya verá como le dice que sí. Luis Madrigal.-
Y una hermosa canción, un bello tango, para recordar a alguien que se fue.
No quiero fatigar a nadie buscando. He aquí el comentario a la entrada anterior de referencia (29/Junio/09, formulado por el Sr. "franco"
Blogger franco dijo...
Creo que por su devoción a una patria, la biblia, tauromaquia y demás, no debemos coincidir en casi nada. Pero, a ver, hablando de mediocridades... si bien ninguno de los dos Kirchner que fueron presidentes son algo altamente deseable, ¿no le parece que quienes ganaron son ampliamente peores? Me parece que su análisis es en extremo superficial y que solamente actúa como la caterva de "opositores de profesión" que hay en este país, que piensan únicamente en que quien está en el poder ejecutivo de momento es el enemigo, sin siquiera considerar algún dato extra. Es algo terrible que Macri y De Narváez ganen votos, y consecuentemente poder. No sé cómo puede compatibilizar su crítica hacia el generalísimo Franco y su festejo por la victoria de quienes celebran las dictaduras en Argentina. No creo que su espíritu democrático tenga como frontera los límites geográficos de España, ¿o sí? Tal vez su crítica a la mediocridad debiera pararse ante el espejo durante unos instantes también.
Me encanta, me encanta. La crítica que se pretende dirigida desde la cima de una alta montaña hacia abajo olvida que siempre existe un lugar más alto en este Universo relativizado. Sí, me llamo Franco, ¿está mal que mis padres hayan elegido ese nombre en algún momento de sus extrañas vidas? Mi segundo nombre es Santiago. ¿Cambia algo eso su análisis de mi personalidad? Me asombra que ante un comentario político la crítica sea depositada tan extensamente sobre mi nombre. Me resultan perfectamente indiferentes su nombre, apellido, profesión (¡oh, abogacía! ¡madre de la estafa racionalizada si las hay! A riesgo de perder, apostaría varios dedos de mis manos a que usted jamás defendió a un indigente apaleado por la policía sin cobrarle honorarios), nacionalidad o preferencias de las que sean. Además, puede perfectamente estar mintiendo en todos esos datos. Internet no garantiza nada. Me encantaría ver qué relación existe entre gente que se enriquece (la familia Macri tiene un largo historial de movidas asquerosamente sucias frente al Estado, y sobre De Narváez no puedo hablar mucho, pero me resulta extremadamente decidor el hecho de que no se presente a dar testimonio ante abogados como usted para dar explicaciones sobre cuál es su relación con ciertos traficantes de drogas), decía, cuál sería la relación entre gente con riqueza -que nunca va a repartir- y estadistas dispuestos a sacar adelante algún país. Esto no es retórica, amigo, hablemos de hechos, no de discursos pomposos con erudición caduca. Hablemos de humano a humano, no de proto-sabio a ser inferior. Tengo 20 años. No es necesario que me trate de manera incómoda, puede hablarme tal y como se le antoje, que no soy susceptible.
Otra pregunta que, espero, no resulte indiscreta ante sus simpáticos ojos: ¿por qué modera los comentarios? ¿la libertad de expresión es sólo para quienes usted quiera?
Mire Usted,Don Franco Santiago: Me gusta mucho su segundo nombre, pero está diametralmente equivocado conmigo. He defendo, sin que me pagasen nada, a muchas más personas de las que Usted puede suponer. Su presunción es gratuita y ofensiva, en lo que personalmente se refiere a mí. En todo el mundo, los abogados tienen una bien ganada mala fama, pero puedo asegurarle que yo, siempre he ejercido la Abogacía como proponía Ulpiano, aquel ilustre jurisconsulto romanpo, de la era post-clásica: "Somos sacerdotes, sí, y nuestra misión es la de acercar y hacer buenos a los hombres". Esto del "sacerdocio" supongo que a Usted, que dice carecer, además de una patria, de toda Biblia, le hará morirse de risa, porque imagino que sera ateo. Lo siento mucho. Rezaré por Usted para que algún día encuentre la Luz. No obstante, siento decepcionarle, pero Usted no es amigo mío. Le ruego por favor que no me lo llame . Dice tener 20 años. Es Usted tan joven como impertinente, pero no se preocupe, eso se pasa. Tan sólo hace falta algún tiempo. Por último, yo no critico a nadie. Simplemente expreso mi opinión respecto a lo que me parece, bien o mal. En cualquier caso, no lo hago desde ninguna montaña, sino a ras de suelo, como ahora mismo. Sí es verdad que pretendo llegar a la verdadera montaña, hasta su cima, pero es una Montaña "mágica" y con mayúscula. Le saludo atentamente.
Aunque renuncio a triturarle, me cansé de Usted, Mire, voy a contestar a su última pregunta: Modero los comentarios, porque quiero; es decir, como decimos en España, porque me da la gana. Algunos dicen "la real gana", pero yo soy republicano. Otros dicen otras cosas, bastante procaces, relacionando la voluntad, que es una potencia del alma, con los órganos genitales, de donde dicen "salirles" esa suprema facultad de querer o no querer. Pues bien, ya sabe por qué modero comentarios. Por último, últimísimo: Como me he cansado de Usted, no tanto como de sus 20 años, no vuelva a tratar de formular ningún comentario a lo que yo escriba o publique. ¿Queda enterado? Ninguno. Adiós, siento que sea Usted argentino, porque sinceramente quiero a esa gran Nación. Pero, qué le vanmos a hacer, también lo son sus inútiles amigos los Kirchner. Que se cure pronto de sus 20 años. ¡Quién los tuviera...! Aunque, le aseguro que a esa misma edad, yo no era tan estúpido y tan ligero de mollera como Usted. Haga comentarios a otras personas de su misma estatura intelectual. Los hay a montones por estos mundos de Internet.
Sin querer hacer papel de moderador en comentarios en los cuales no ha habido más que criticas a sus respectivos comentarios me limito a participar de dicha conversación, si su "gana" como establece lo permite y si la libertad de expresión que defiende en su profesión le gana a esa prerrogativa de censurar ideas de las cual parece es fanático y justifica con la frase "porque me da la gana". Soy estudiante de abogacía y filosofía de Rio cuarto Prov de Córdoba de la República Argentina. Se lo establezco para que no se ofenda por mi anonimato aunque a decir verdad bien podría mentir sobre los datos, pero en lo que no mentiría es en mis ideas que estoy dispuesto a hacérselas saber y a que sean publicadas si "su antojo" lo quiere. Sabido es por él y si usted quiere por todos que la posición ideológica de Franco lejos esta de coincidir con la mía, pero leyendo sus comentarios, en especial el primero relativo al matrimonio Kirchner y al resultado de las elecciones me sentí muy desilusionado y quizás dolido por los sentimientos que le provocaron esos sucesos. Lejos estoy de acordar en las disposiciones de la señora presidenta y su predecesor, pero si en realidad nos trataría como hermanos a los residentes de este país sabría que, además de los golpes de Estado que aquejaron a nuestra patria, uno de los principales problemas que produjo la situación en la que nos encontramos fue el neoliberalismo de la década del 90 llevado a cabo por la presidencia menemista. Y que lo propugnado por los candidatos que han ganado la reciente elección son esas mismas medidas que pusieron en jaque a nuestro país. Que no se encuentra en la situación en la que está por azar sino por las malas decisiones que tomó el pueblo desde sus orígenes al elegir a malos dirigentes y luego a no comprometerse en el progreso del país fomentando el individualismo y el "sálvese quien puede". Pero hay otra parte de este país no presa de lo que dicen los medios de comunicación, monopolizados debe saber usted, por los mismos grupos que han ganado la elección. Y ya hemos llorado suficiente por este resultado electivo que parece profetizar la vuelta al neoliberalismo a través de Mauricio Macri en 2011, sucesor de Carlos Menem (espero lo conozca debido a la buena relación que mantuvo con su país, y a la buena educación que parece ostentar)
Por favor, no se alegre por nuestros males, nosotros hemos llorado lo suficiente por ellos y lo seguiremos haciendo. Ya que el mal de los Kirchner es mucho menor al del modelo neoliberal. Con respecto a sus argumentos, creo que, sin desprestigiarlos y con educación se lo digo, espero por favor no se enoje. Me parece un poco inocente decir que por el hecho de que Mauricio Macri y su compañero de Narvaéz sean ricos van a repartirla. Más cuando nos encontramos en un mundo donde el 15% de la población ostenta el 90% de los recursos. Me encantaría que me diga en que momento va a ser repartida. Además, nuestra actual presidente Cristina Férnandez de Kirchner, junto con su marido son millonarios y dueños de casi toda la prov. de Santa Cruz, ellos no han repartido su riqueza, tampoco el padre de Mauricio Macri ¿Que le hace pensar que de Narvaez y Don Mauricio van a hacerlo? Luego, donde dice que la calidad de ingeniero de Don Mauricio es una señal de que va a realizar una buena gestión por su educación supongo resulta más falaz aún. Si leyera nuestra historia sabría que la presidencia de los tres ilustrados (Sarmiento Roca y Avellaneda) fueron una de las mas deplorables gestiones en nuestra dolida y joven nación, y que su calidad de intelectuales le hicieron regalar a Chile una franja de territorio que posibilitaba nuestra salida al mar pacifico (Sarmiento) matar a millones de indigentes (Roca) Etc. También le podría nombrar que una de las presidencias más positivas en Latinoamérica fue llevada por Lula Da Silva (persona que no terminó el secundario) Como bien cita a Ulpiano aunque no con palabras exactas, le recuerdo que no estamos en Roma donde solo los padres de familia y los que ostentaban el Caput (totalidad de derechos) podían hablar, y que mi corta edad no le impida publicar o tener en cuenta mi comentario. Además de esto aprovecho para decirle que lo cordial no quita lo valiente, y si llega a responderme, le pido por favor no utilice agraviantes ni malas palabras. Sócrates decía en boca de Platón que el diálogo fomentaba el conocimiento espero podamos establecer uno en buenas condiciones. Atentamente lo saludo y lo felicito por la fraternidad que profesa la cual es digna de admirar.
7 comentarios:
No quiero fatigar a nadie buscando. He aquí el comentario a la entrada anterior de referencia (29/Junio/09, formulado por el Sr. "franco"
Blogger franco dijo...
Creo que por su devoción a una patria, la biblia, tauromaquia y demás, no debemos coincidir en casi nada. Pero, a ver, hablando de mediocridades... si bien ninguno de los dos Kirchner que fueron presidentes son algo altamente deseable, ¿no le parece que quienes ganaron son ampliamente peores?
Me parece que su análisis es en extremo superficial y que solamente actúa como la caterva de "opositores de profesión" que hay en este país, que piensan únicamente en que quien está en el poder ejecutivo de momento es el enemigo, sin siquiera considerar algún dato extra.
Es algo terrible que Macri y De Narváez ganen votos, y consecuentemente poder. No sé cómo puede compatibilizar su crítica hacia el generalísimo Franco y su festejo por la victoria de quienes celebran las dictaduras en Argentina. No creo que su espíritu democrático tenga como frontera los límites geográficos de España, ¿o sí?
Tal vez su crítica a la mediocridad debiera pararse ante el espejo durante unos instantes también.
4 de julio de 2009 5:30
Me encanta, me encanta. La crítica que se pretende dirigida desde la cima de una alta montaña hacia abajo olvida que siempre existe un lugar más alto en este Universo relativizado.
Sí, me llamo Franco, ¿está mal que mis padres hayan elegido ese nombre en algún momento de sus extrañas vidas? Mi segundo nombre es Santiago. ¿Cambia algo eso su análisis de mi personalidad? Me asombra que ante un comentario político la crítica sea depositada tan extensamente sobre mi nombre.
Me resultan perfectamente indiferentes su nombre, apellido, profesión (¡oh, abogacía! ¡madre de la estafa racionalizada si las hay! A riesgo de perder, apostaría varios dedos de mis manos a que usted jamás defendió a un indigente apaleado por la policía sin cobrarle honorarios), nacionalidad o preferencias de las que sean. Además, puede perfectamente estar mintiendo en todos esos datos. Internet no garantiza nada.
Me encantaría ver qué relación existe entre gente que se enriquece (la familia Macri tiene un largo historial de movidas asquerosamente sucias frente al Estado, y sobre De Narváez no puedo hablar mucho, pero me resulta extremadamente decidor el hecho de que no se presente a dar testimonio ante abogados como usted para dar explicaciones sobre cuál es su relación con ciertos traficantes de drogas), decía, cuál sería la relación entre gente con riqueza -que nunca va a repartir- y estadistas dispuestos a sacar adelante algún país.
Esto no es retórica, amigo, hablemos de hechos, no de discursos pomposos con erudición caduca. Hablemos de humano a humano, no de proto-sabio a ser inferior.
Tengo 20 años. No es necesario que me trate de manera incómoda, puede hablarme tal y como se le antoje, que no soy susceptible.
Otra pregunta que, espero, no resulte indiscreta ante sus simpáticos ojos: ¿por qué modera los comentarios? ¿la libertad de expresión es sólo para quienes usted quiera?
Mire Usted,Don Franco Santiago: Me gusta mucho su segundo nombre, pero está diametralmente equivocado conmigo. He defendo, sin que me pagasen nada, a muchas más personas de las que Usted puede suponer. Su presunción es gratuita y ofensiva, en lo que personalmente se refiere a mí. En todo el mundo, los abogados tienen una bien ganada mala fama, pero puedo asegurarle que yo, siempre he ejercido la Abogacía como proponía Ulpiano, aquel ilustre jurisconsulto romanpo, de la era post-clásica: "Somos sacerdotes, sí, y nuestra misión es la de acercar y hacer buenos a los hombres". Esto del "sacerdocio" supongo que a Usted, que dice carecer, además de una patria, de toda Biblia, le hará morirse de risa, porque imagino que sera ateo. Lo siento mucho. Rezaré por Usted para que algún día encuentre la Luz. No obstante, siento decepcionarle, pero Usted no es amigo mío. Le ruego por favor que no me lo llame . Dice tener 20 años. Es Usted tan joven como impertinente, pero no se preocupe, eso se pasa. Tan sólo hace falta algún tiempo. Por último, yo no critico a nadie. Simplemente expreso mi opinión respecto a lo que me parece, bien o mal. En cualquier caso, no lo hago desde ninguna montaña, sino a ras de suelo, como ahora mismo. Sí es verdad que pretendo llegar a la verdadera montaña, hasta su cima, pero es una Montaña "mágica" y con mayúscula. Le saludo atentamente.
Aunque renuncio a triturarle, me cansé de Usted, Mire, voy a contestar a su última pregunta: Modero los comentarios, porque quiero; es decir, como decimos en España, porque me da la gana. Algunos dicen "la real gana", pero yo soy republicano. Otros dicen otras cosas, bastante procaces, relacionando la voluntad, que es una potencia del alma, con los órganos genitales, de donde dicen "salirles" esa suprema facultad de querer o no querer. Pues bien, ya sabe por qué modero comentarios. Por último, últimísimo: Como me he cansado de Usted, no tanto como de sus 20 años, no vuelva a tratar de formular ningún comentario a lo que yo escriba o publique. ¿Queda enterado? Ninguno. Adiós, siento que sea Usted argentino, porque sinceramente quiero a esa gran Nación. Pero, qué le vanmos a hacer, también lo son sus inútiles amigos los Kirchner. Que se cure pronto de sus 20 años. ¡Quién los tuviera...! Aunque, le aseguro que a esa misma edad, yo no era tan estúpido y tan ligero de mollera como Usted. Haga comentarios a otras personas de su misma estatura intelectual. Los hay a montones por estos mundos de Internet.
Sin querer hacer papel de moderador en comentarios en los cuales no ha habido más que criticas a sus respectivos comentarios me limito a participar de dicha conversación, si su "gana" como establece lo permite y si la libertad de expresión que defiende en su profesión le gana a esa prerrogativa de censurar ideas de las cual parece es fanático y justifica con la frase "porque me da la gana".
Soy estudiante de abogacía y filosofía de Rio cuarto Prov de Córdoba de la República Argentina. Se lo establezco para que no se ofenda por mi anonimato aunque a decir verdad bien podría mentir sobre los datos, pero en lo que no mentiría es en mis ideas que estoy dispuesto a hacérselas saber y a que sean publicadas si "su antojo" lo quiere.
Sabido es por él y si usted quiere por todos que la posición ideológica de Franco lejos esta de coincidir con la mía, pero leyendo sus comentarios, en especial el primero relativo al matrimonio Kirchner y al resultado de las elecciones me sentí muy desilusionado y quizás dolido por los sentimientos que le provocaron esos sucesos.
Lejos estoy de acordar en las disposiciones de la señora presidenta y su predecesor, pero si en realidad nos trataría como hermanos a los residentes de este país sabría que, además de los golpes de Estado que aquejaron a nuestra patria, uno de los principales problemas que produjo la situación en la que nos encontramos fue el neoliberalismo de la década del 90 llevado a cabo por la presidencia menemista. Y que lo propugnado por los candidatos que han ganado la reciente elección son esas mismas medidas que pusieron en jaque a nuestro país. Que no se encuentra en la situación en la que está por azar sino por las malas decisiones que tomó el pueblo desde sus orígenes al elegir a malos dirigentes y luego a no comprometerse en el progreso del país fomentando el individualismo y el "sálvese quien puede". Pero hay otra parte de este país no presa de lo que dicen los medios de comunicación, monopolizados debe saber usted, por los mismos grupos que han ganado la elección. Y ya hemos llorado suficiente por este resultado electivo que parece profetizar la vuelta al neoliberalismo a través de Mauricio Macri en 2011, sucesor de Carlos Menem (espero lo conozca debido a la buena relación que mantuvo con su país, y a la buena educación que parece ostentar)
Por favor, no se alegre por nuestros males, nosotros hemos llorado lo suficiente por ellos y lo seguiremos haciendo. Ya que el mal de los Kirchner es mucho menor al del modelo neoliberal.
Con respecto a sus argumentos, creo que, sin desprestigiarlos y con educación se lo digo, espero por favor no se enoje. Me parece un poco inocente decir que por el hecho de que Mauricio Macri y su compañero de Narvaéz sean ricos van a repartirla. Más cuando nos encontramos en un mundo donde el 15% de la población ostenta el 90% de los recursos. Me encantaría que me diga en que momento va a ser repartida. Además, nuestra actual presidente Cristina Férnandez de Kirchner, junto con su marido son millonarios y dueños de casi toda la prov. de Santa Cruz, ellos no han repartido su riqueza, tampoco el padre de Mauricio Macri ¿Que le hace pensar que de Narvaez y Don Mauricio van a hacerlo?
Luego, donde dice que la calidad de ingeniero de Don Mauricio es una señal de que va a realizar una buena gestión por su educación supongo resulta más falaz aún. Si leyera nuestra historia sabría que la presidencia de los tres ilustrados (Sarmiento Roca y Avellaneda) fueron una de las mas deplorables gestiones en nuestra dolida y joven nación, y que su calidad de intelectuales le hicieron regalar a Chile una franja de territorio que posibilitaba nuestra salida al mar pacifico (Sarmiento) matar a millones de indigentes (Roca) Etc. También le podría nombrar que una de las presidencias más positivas en Latinoamérica fue llevada por Lula Da Silva (persona que no terminó el secundario)
Como bien cita a Ulpiano aunque no con palabras exactas, le recuerdo que no estamos en Roma donde solo los padres de familia y los que ostentaban el Caput (totalidad de derechos) podían hablar, y que mi corta edad no le impida publicar o tener en cuenta mi comentario.
Además de esto aprovecho para decirle que lo cordial no quita lo valiente, y si llega a responderme, le pido por favor no utilice agraviantes ni malas palabras.
Sócrates decía en boca de Platón que el diálogo fomentaba el conocimiento espero podamos establecer uno en buenas condiciones.
Atentamente lo saludo y lo felicito por la fraternidad que profesa la cual es digna de admirar.
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