viernes, 11 de junio de 2010

TRECE SONETOS DE AMOR (XII)

TE VEÍA TRAS LAS NUBES


Nublado estaba el cielo, y te veía
dentro de mí, tan nítida y serena.
El oro, en tus cabellos... Y la pena
en tus ojos, tan tristes como el día.

Soñaba que a ellos yo les sonreía
desde mi alma, de suspiros llena,
para apartar de ellos la condena
en un breve "tic-tac", y hacerla mía.

Desterrar de esos ojos la tristeza
y encenderlos de luz, de sol, de fuego,
para que brille en ellos tu belleza

y, en éxtasis de amor, a impulso ciego,
junto a mis labios, presos con firmeza,
poder besar los tuyos con sosiego.



Luis Madrigal



3 comentarios:

Mercedes Pinto dijo...

Una vez más, he venido a disfrutar de tus letras. Gracias.
Un abrazo.

Pluma Roja dijo...

Como dice Mercedes, se viene a disfrutar de tus letras y tu música.

Saludos cordiales,

El Gaucho Santillán dijo...

Excelente, Luis.

El poema es magnìfico.

Saludos