miércoles, 28 de diciembre de 2011

RESPLANDECE EN EL CIELO




EL FULGOR DE UNA ESTRELLA
 

Cuando se muere el sol, nace una estrella
que brilla allá en lo alto, transparente.
Alumbra el caminar y, refulgente,
disipa la tiniebla… Ya destella,

ya tiembla en su fulgor, y sólo ella
ilumina mi paso y mi presente,
pese a estar siempre lejos, siempre ausente,
mas, al caer de la tarde, siempre bella.

Me embelesa mirarle. Ella me mira,
pero su rayo, apenas mortecino,
no alcanza mis pupilas. La mentira

nunca está en las estrellas. Y el andino
reflejo celestial se apaga y gira.
Deja al humano ser por el divino.



Luis Madrigal
 
 
 
 
 

3 comentarios:

Mariana dijo...

Bellissima Letras conjungando una poesía, selecta y profunda.
¡ FELIZ AÑO NUEVO LUIS !
Disculpa mi ausencia, estoy complicada con los tiempos...pero ya encontré un huequito para mis Letras...
Mis cariños de siempre.

Luis Madrigal Tascón dijo...

No tengo nada que disculpar, querida Mariana, por falta de materia. Me alegro mucho de poder saber de ti y te deseo que dispongas nuevamnete de todo el tiempo necessrio. Feliz Navidad, Mariana. Un beso. Luis.-

MA dijo...

Hola Luis sigo tu blog.
Te invito a visitar el mio
El blog de MA, mil gracias desde ya.

Hermosos versos nos regalas escritos con el sentir de tu alma.

Mis felicitaciones.
Feliz año nuevo 2012 con todos los anhelos cumplidos.

Un abrazo fraternal de MA.