Ha vuelto a nevar sobre Madrid y, aunque no en forma tan copiosa como en la cercana Ávila, durante los dos últimos días nuevamente ha vuelto a sentirse un frío seco, duro, cortante, contundente, que hiela los suspiros, congelando el aliento antes de que la voz se haga palabra. El Padre Sol -que a mí me trata de "don", con desproporción absoluta, y tan sólo por obra y gracia de un buen amigo de la ribera mediterránea- ha vuelto a desampararnos, sumiéndonos de nuevo casi en la noche en pleno día, tan sólo más claro otra vez por la presencia de la nieve. Estos últimos acontrecimientos, estrictamente meteorológicos (y pido clemencia a mi buen amigo mediterránido, que habita en la "que cubierta en todo tiempo de flor está"), me han inspirado el tercero de los poemas de estas "estampas invernales". Querido Man, sé benevolente con el pobre y entumecido "poeta" y que nuevamente aquí canta y se lamenta -"se duele", en el argot taurino que a ti también te gusta- suspirando por la luminosa Primavera y, tras ella, por el largo y cálido Verano. Aquí está el poema:
¿CUÁNDO SE HARÁ LA LUZ?
No puedo ya ahora ver lo que antes era...
Tampoco lo que fue... Sólo lo yerto,
angosto y sin destino, gris, incierto,
salpica mi existir, sin Primavera.
¿Cuándo, por fin, se acaba esta quimera
y se enciende la luz... y el hiemal muerto
entierra sus zarpazos en el huerto,
donde crece el jazmín? Y, a su vera
luminosos y ardientes tulipanes
que, hacia sí, entre la hiedra y el asfalto,
atraigan medio día, como imanes,
toda la luz que el sol, desde lo alto,
envía paternal... Y sin desmanes,
besar el suelo al cielo de un gran salto
Luis Madrigal
Y para lamentarse, nada mejor que un buen gallego
y, a ser posible, una muñeira. Esta "Alborada", de Veiga
podría ser un magnífico ejemplo
No puedo ya ahora ver lo que antes era...
Tampoco lo que fue... Sólo lo yerto,
angosto y sin destino, gris, incierto,
salpica mi existir, sin Primavera.
¿Cuándo, por fin, se acaba esta quimera
y se enciende la luz... y el hiemal muerto
entierra sus zarpazos en el huerto,
donde crece el jazmín? Y, a su vera
luminosos y ardientes tulipanes
que, hacia sí, entre la hiedra y el asfalto,
atraigan medio día, como imanes,
toda la luz que el sol, desde lo alto,
envía paternal... Y sin desmanes,
besar el suelo al cielo de un gran salto
Luis Madrigal
Y para lamentarse, nada mejor que un buen gallego
y, a ser posible, una muñeira. Esta "Alborada", de Veiga
podría ser un magnífico ejemplo
11 comentarios:
La música no la he podido recibir como hubiese querido para acompañar tu precioso poema lleno de colorido, belleza y canto a la primavera.
Para mí ha llegado.
Un abrazo
Aquí los tulipanes son un lujo, por eso prefiero las margaritas, agapantos, gerveras y rosas.
El beso del suelo al cielo, bella imagen, la buscaré entre las mías.
Alicia
Pregunta ¿notaste que la columna lateral de tu blog desapareció?
Quizás sea la niebla de tus imágenes invernales, pero no la puedo ver.
Un abrazo, Luis.
Alicia
Desde la Costa del Sol. A mí me gusta el invierno, me gusta el recogimiento, la intimidad, la chimenea, cada cual en su casa, los jarines vacios... el silencio. Ninguna noticia me alegra más que la llegada del otoño; hay tanto tiempo por delante para escribir...
"Tie que avé de tó".
Un cariñoso saludo.
Alicia, que encuentres esa bella imagen. Si el suelo besara al cielo, más frecuentemente, todos viviríamos felices y en paz. Ojalá encuentres esa imagen entre las tuyos. Seguro que la encuentras sin dificultad. COnsultaré lo de la cvolumna derecha con otras personas. Un beso.
Querida "C". Lamento que no puedas escuchar la música. No es muy buena la grabación pero yo puedo oírla bien. Es la "Alborada", de Veiga, paradigma de las muñeiras gallegas, y muy apropiada para los días invernales de Galicia, en lo que no se puede ver el sol. Mi cariñoso saludo.
Mercedes, en la Costa del Sol, también me gustaría a mí el Invierno. Escribir, se puede en cualquier tiempo, pero tal vez es esta la época más indicada. De esta semana no pasa sin que lea los capítulos publicados de tu novela "Maldita". Te daré mi sincera opinión, con mi más cordial saludo.
Gracias a las tres por vuestro interés, que no merezco. ¿Dónde se habrá metido Man? Le echo de menos. Luis Madrigal.-
Para Luis y para todos vosotros.
Man está ahora en silencio pero no se ha ido. Siempre tengo un ratigo para entrar a leereo y disfrutar de vosotros.
No os creais que este silencio va durar siempre, no; puede que un mes o menos y mi silencio es solo para escribir en mi blog.
Por favor, no me olvideis. Por favor no os confieis pues un día, pronto, volveré y me alegraré ver que me estais eperando.
Vosotros que tan cariñosamente me habeis acogido en vuestro circulo. Vosotros mis amigos.
Un abrazo y un beso.
Querido Man: Aquí estaremos, esperando impacientes tu regreso. Espero que nos traigas grandes cosas. Tú, eres muy capaz. Un abrazo. Luis.-
¡Que grande eres Luis! Yo soy muy afortunado de que me tengas por amigo , y se que es muy cierto que así es. Estaba leyendo algo de poesia, sabes que no entiendo nada en esa materia, pero era tal el reucerdo que me venía de tí, que no me quedó más remedio que entrar en tu Blog. ¡Que maravilla! y pensar que yo, el más vil de los siervos de Dios fui bautizado el día de Reyes, día de la Manifestación del Señor? Vasije de barro sin fondo, eso soy yo. ¿Puedo llamarte amigo?
No digas tonterías, querido "Palizas". Tú eres mucho más grande que yo. No sólo en estatura, que eso es muy visible y obejetivo, sino en casi todo lo demás. Yo no soy piloto de vuelos sin motor, por ejemplo, y por tanto nunca he podido sentir el inmenso placer de volar, como tú, y como Saint-Exupéry. Lo mismo que él, tú has estado, por tus propias manos, a esa gran altura en la que la tierra debe verse tan pequeña y el cielo está mucho más cerca. La única diferencia, afortunadamente para mí, es que tú no has desaparecido como él, aunque lo fuese en un halo de misterio y romanticismo. No acepto, ni en broma, que seas una vasija de barro sin fondo. Una vasija de barro sí, pero casi directamente salida de las manos del Alfarero, sin que nunca haya estado ni esté ahora vacía. No, eso de ningún modo. Tus manos están repletas de buenas obras, generosas y hasta abnegadas, ¿ya no te acuerdas de aquel "protestante", al que acogiste en tu casa más de un mes? No puedes llamarte amigo mío, porque lo eres desde hace mucho tiempo. ¿Tampoco te acuerdas, de cuando ibamos a "predicar" por ahí, por aquellos pueblos de Dios, en aquella vieja motocicleta?. Tú eras también quién la conducía. Un abrazo, querido "Palizas".¿A quién has tenido hoy, un par de horas, oyendo tus sabias alocuciones? ¿Has hecho ya la "lista?. Incluye en ella que no debes olvidarte de rezar por mí.Pero ¡hazlo, ¿eh?!. Hazlo. Luis.-
¿Sabes lo que le digo al Jefe? Con estos amigos ¿Quién no es amigo del Jefe? ¿aunque fuere solo por reconocimiento?
Gracias. Luis
¿Hay ya alguno de nuestros comunes amigo que lean y hagan comentarios a tu Blog? Me parece que voy a tener que rezar un poco más y tomar el "as de bastos" como cayado y hacerles una visita. ¡No serán pequeños malditos roedores...!
Un abrazo. Joma
I truly believe that we have reached the point where technology has become one with our society, and I am fairly confident when I say that we have passed the point of no return in our relationship with technology.
I don't mean this in a bad way, of course! Ethical concerns aside... I just hope that as the price of memory falls, the possibility of downloading our brains onto a digital medium becomes a true reality. It's one of the things I really wish I could encounter in my lifetime.
(Posted on Nintendo DS running [url=http://knol.google.com/k/anonymous/-/9v7ff0hnkzef/1]R4i[/url] DS SurfV3)
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