LLEGÓ HASTA TU VENTANA
No lo sabrás, ni nunca en ti su eco
podrás sentir de lejos en tu alma.
Habrá muerto sin ti, bajo la luna,
en una noche fría, en la que el agua
azotaba con furia tu ventana.
¡Quería entrar...! No le dejaste
y murió sin saber que tú no estabas.
Una flor [¿quizá era una gerbera?] mustia dijo su palabra:
"Se fue... No está aquí ya..." Tú, no mirabas,
ni veías, ni podías oír cómo gritaba
el agua, al golpear en los cristales
de la que había sido tu morada...
No estabas tú, y tu ventana
aquella noche estaba bien cerrada.
Luis Madrigal
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5 comentarios:
Aquí de nuevo, leyéndote, disfrutando con tus poemas.
De los tres últimos, no sé cuál me gusta más.
Saludos de nuevo.
poemas sobre ausencias, interesante!
Un saludo.
Luís, un poema que llega hasta el corazón de puro sentimiento y sensibilidad.
Un gusto volver a leerte de nuevo.
Mi abrazo admirado.
Candela
Luis, cuando llega el otoño... las personas sensibles nos convertimos en barómetros humanos.
Un abrazo
Todos estos poemas sobre ausencias,me parecen preciosos.A mi me dejan un poco "tocada",pero puede ser que yo estos dias estoy más sensiblona.
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