LLEGA LA FORTALEZA
Ese pavor de espanto que
te inunda
y llena el alma entera a
toda hora.
Ese temblor inmóvil que
devora
hasta lo hondo la paz en
barahúnda.
Esa voz sin sonido, tan
profunda;
ese llanto sin lágrimas
que llora;
esa súplica, que del
cielo implora,
casi fin fe, esclava y
vagabunda.
Es hora de valor y
reciedumbre,
hasta ahogar el suplicio
en dique seco.
Apagar con un témpano la
lumbre.
Subir con nuevas alas a
la cumbre,
para escuchar en paz un
nuevo eco
y trocar en encanto pesadumbre.
Luis
Madrigal
EL CANTO DEL LAMA
(Jean Michel Reusser)
Deseos para el Despertar
1 comentario:
Hola, D.Luís.
Espero que se encuentre bien.
¡Preciosidad de soneto...es perfecto! Y me gusta que en él, el temor y hundimiento se vaya volviendo esperanza en ese último terceto. Me ha gustado mucho.
Sigo sin saber nada de usted...no comenta los blog...pero bueno, al menos, si escribe, es que está bien.
Reciba mi fraterno abrazo.
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